(Continúa de: Los Ālvār)
Nāthamuni Luego que Nammālvār contraiga samādhi, la fe Śrī Vaiṣṇava quedó eclipsada por varias generaciones. Sólo algunas de las composiciones del los Ālvār se conservaron. Cerca del Siglo IX, un maestro llamado Nāthamuni oyó a un grupo de peregrinos cantar algunos de los versos compuestos por Nammālvār. Él quedó tan afectado por la belleza de esos versos que corrió hacia ellos y les pidió que se los enseñara. Los peregrinos respondieron que ellos sólo conocian diez de los diez mil versos compuestos por Nammālvār. También le contaron de su grandeza. Fue ahí que Nāthamuni decidió ir inmediatamente en busca de los versos perdidos y comenzó su viaje a Ālvār Tirunagarī. Allí conoció a Parānkuśadāsa, un discípulo de Madhurakavi, quién le mostrara una de las composiciones de Madhurakavi sobre Nammālvār, y le pidió que las recite muchísimas veces. Nāthamuni fue al mismo árbol de tamarindo donde Madhurakavi vió a Nammālvār y se sentó a recitar estos versos docemil veces con gran devoción. Cuando estaba en estado meditativo, tuvo la visión de Madhurakavi y Nammālvār. Fue a traves de esta interacción que recibió los versos perdidos compuestos por Nammālvār. Nammālvār también le enseñó los secretos del Yoga Rahasya y del Bhagavad Viṣaya. Este fue un punto de quiebre en la vida de Nāthamuni y es por eso que comenzó a reavivar la antigua tradición de Śrī Vaiṣṇava (Vishnuista). Entre sus grandes trabajos está el Yoga Rahasya, que es un sumario de las enseñanzas que recibiera de Nammālvār. Se dice que Nathamuni tuvo ocho discípulos, a los cuales les enseñó lo que él mismo recibió de su guru espiritual, Nammālvār.
Kausthub Desikachar
© KYM
Próxima entrega: La unión entre los Ālvār y los Ācārya